MENÚ

San José

Este excelente grupo escultórico ha pasado por diversas atribuciones, desde Juan de Mesa (1583-1627) a José Montes de Oca (c. 1676-1754), pero desde nuestro punto de vista, y tras su pertinente estudio técnico y estilístico, nos parece obra segura del genial maestro alcalaíno Juan Martínez Montañés (1568-1648), quien cultivó esta iconografía de San José andariego con el Niño Jesús en el desaparecido conjunto que le encargó en 1605 el gremio sevillano de carpinteros de ribera y en los que se conservan en la iglesia de la Victoria de Medina Sidonia (Cádiz), fechado en 1638, y en la parroquia de Santa María de la Concepción de Dílar (Granada), este último de pequeño formato y muy relacionado con el de la parroquia hispalense de la Magdalena, el cual puede fecharse en la segunda década del siglo XVII.

A San José se le ha representado erguido, en actitud de reposado y sereno contrapposto de raigambre clásica, adelantando ligeramente la pierna izquierda, que aparece exonerada y con la rodilla flexionada, al tiempo que descarga el peso del cuerpo en la contraria, mostrando ambos pies calzados con sandalias. La consiguiente incurvación de sus caderas se adivina bajo los pliegues de la túnica, ceñida por un cinto anudado a la diestra. El manto se ha dispuesto cayendo por la espalda y recogiéndose en torno al brazo izquierdo, que se adelanta para sostener la tradicional vara de azucenas, mientras que el derecho desciende para coger de la mano y caminar junto al pequeño Jesús, en cuya dirección ladea e inclina la cabeza, de nobles rasgos faciales e introspectiva actitud. El pequeño infante, que nos bendice con la diestra, delata en su morfología y grave expresión la impronta montañesina. La actual policromía y deslumbrante estofado que presentan las vestimentas de ambas figuras data de la segunda mitad del siglo XVIII, como lo delata la presencia de rocallas.

José Roda Peña